Un viaje intercultural a lo largo de la historia de la mano de leyendas de la traducción cuyo trabajo logró trascender fronteras y transformar el mundo de la literatura. Los traductores hacen más que convertir palabras de un idioma a otro.
Salvan las brechas de comunicación, fomentan la comprensión e influyen en las culturas.
Un claro ejemplo de cómo la traducción va más allá de transferir contenidos entre idiomas es la traducción literaria. Gracias a esta disciplina, podrás disfrutar de la lectura de obras maestras de escritores/as extranjeros/as en tu propio idioma.
Como dijo el escritor italiano Italo Calvino: «Sin traducción, me vería limitado a las fronteras de mi propio país. El traductor es mi aliado más importante. Me presenta al mundo».
A pesar de su papel crucial, los/as traductores/as a menudo trabajan en la sombra y sus contribuciones pasan desapercibidas. Por ello, queremos rendir homenaje a traductores/as relevantes cuyo trabajo ha dejado huella en la literatura, la cultura y la sociedad.
Desde los eruditos medievales que preservaron el conocimiento antiguo hasta los/as traductores/as modernos/as que acercan obras contemporáneas al público global. Continúa leyendo para conocer más sobre sus contribuciones a lo largo de los siglos.
La Edad Media
- Hunayn ibn Ishaq (809-873) y Qusta ibn Luqa (820-912)
Estos médicos de origen árabe tradujeron muchas obras médicas griegas al árabe, lo que impulsó la medicina islámica mediante la incorporación del conocimiento griego.
- Robert de Ketton (1110-1160) y Hermán de Carintia (1100-1154)
Tradujeron el Corán al latín, lo que permitió una mejor comprensión del islam entre los cristianos.
- Adelardo de Bath (1080-1152), Juan Hispalense (1110-1153) y Gerardo de Cremona (1114-1187)
Como parte de la Escuela de Traductores de Toledo, tradujeron textos científicos griegos y árabes al latín. Sus contribuciones abarcaron diversos campos, tales como:
-
- la medicina
- la filosofía
- la cosmología
- las matemáticas
- la física
- las ciencias de la naturaleza
- la alquimia
Su trabajo ayudó a difundir el conocimiento en toda la Europa medieval.
- Miguel Escoto (1175-1232) y Guillermo de Moerbeke (1215-1286)
Tradujeron las obras de Aristóteles de los manuscritos griegos al latín, asegurando que las ideas del filósofo influyeran en el pensamiento occidental.
- John Wycliffe (1320-1384)
Wycliffe tradujo la Biblia al inglés vulgar. En aquella época, el inglés era principalmente un idioma hablado, mientras que el latín y el francés se utilizaban más comúnmente para los textos religiosos.
Su traducción sentó las bases para el desarrollo del idioma inglés.
Siglo XVI
- Erasmo de Róterdam (1466-1536)
Produjo una nueva versión en latín del Nuevo Testamento con origen en el griego. Su obra corrigió errores en la Vulgata latina utilizada por la Iglesia Occidental e inspiró la Reforma Protestante.
- Martín Lutero (1483-1546)
Lutero escuchaba a la «gente común» (como él mismo decía) a la hora de traducir la Biblia del hebreo y del griego al alemán. Su objetivo era hacer que los textos religiosos fueran accesibles para todo el mundo.
Su traducción también contribuyó a estandarizar la lengua alemana y a crear una identidad nacional.
Siglo XVII
- Antoine Galland (1646-1715)
Galland introdujo «Las mil y una noches» en Europa a través de su traducción al francés.
El libro despertó una fascinación por la literatura de Medio Oriente e inspiró nuevas traducciones al inglés, alemán, italiano, holandés, ruso y polaco.
- Alexander Pope (1688-1744)
Las traducciones que hizo Pope de las epopeyas de Homero, incluidas «La Ilíada» y «La Odisea», acercaron las historias de los antiguos griegos a los lectores ingleses.
Siglo XVIII
- Giuseppa Barbapiccola (1702-1740)
Su obra más famosa fue la traducción en 1722 de los «Principios de la filosofía» de René Descartes del francés al italiano. Al mostrar los elogios de Descartes al intelecto femenino, abogó por el derecho de las mujeres a aprender.
- Ignacy Krasicki (1735-1801)
Las traducciones que hizo Krasicki de poetas clásicos (Plutarco, Anacreonte, Hesíodo, Teócrito) y modernos (Boileau, Dante, James Macpherson) contribuyeron al caldo de cultivo intelectual y cultural que daría lugar a la Ilustración polaca.
- Claudine Picardet (1735-1820)
Esta química francesa es conocida por traducir publicaciones científicas del italiano, alemán, inglés y sueco.
Su trabajo contribuyó a los avances científicos de la Revolución Química, un movimiento liderado por el químico francés Antoine Lavoisier.
Siglo XIX
- Rifa’a al-Tahtawi (1801-1873)
Tradujo o supervisó la traducción de libros europeos sobre estrategia militar, geografía e historia al árabe.
Al introducir ideas como los derechos políticos, las libertades y la sociedad moderna, su trabajo contribuyó al creciente movimiento contra el dominio colonial británico en Egipto.
- Elizabeth Ashurst (1813-1850) y Matilda Hays (1820-1897)
Motivadas por el deseo de inspirar un cambio ideológico, llevaron la obra de George Sand al público inglés. Las novelas de Sand, que defendían el amor libre y la independencia femenina, eran muy poco convencionales para su época.
- Clémence Royer (1830-1902)
La traducción de Royer de «El origen de las especies» de Darwin introdujo la teoría evolutiva a los intelectuales franceses.
- Mary Louise Booth (1831-1899)
Al comienzo de la Guerra de Secesión en EE. UU., tradujo el libro antiesclavista «El levantamiento de un gran pueblo» en un período de tiempo notablemente corto. Trabajó 20 horas diarias durante una semana y consiguió que la edición estadounidense se publicara en quince días.
Según el senador Charles Sumner, sus traducciones fueron mucho más valiosas para la causa «de lo que lo fue la caballería númida para Aníbal».
Siglo XX
- James Strachey (1887-1967) y Alix Strachey (1892-1973)
Ellos produjeron una traducción de 24 volúmenes de las obras de Freud. Esta edición sirvió como un importante punto de referencia para los/as lectores/as de habla inglesa e influyó en las traducciones a otros idiomas.
- Jorge Luis Borges (1899-1986)
Su inmersión en la literatura comenzó a la tierna edad de 9 años con la traducción de «El príncipe feliz», de Oscar Wilde.
Posteriormente se convirtió en un reconocido traductor, y tradujo obras de diversos idiomas al español. La lista incluye las de Rudyard Kipling, Virginia Woolf, William Faulkner, Edgar Allan Poe, Franz Kafka, Herman Hesse y André Gide.
Siglo XXI
- Edward George Seidensticker (1921-2007)
Gracias a su trabajo, los lectores de habla inglesa pueden disfrutar de libros de autores japoneses como Yukio Mishima, Jun’ichirō Tanizaki y Yasunari Kawabata.
Según el New York Times, «se suele atribuir a las traducciones de Seidensticker el mérito de haber ayudado a Kawabata a conseguir el Premio Nobel de Literatura en 1968».
- Stephen Mitchell (1943-presente)
Conocido por sus vibrantes traducciones de textos antiguos, Mitchell ha dado nueva vida a obras como «La Ilíada», «Gilgamesh» y «Tao Te Ching».
Curiosidad: el Wall Street Journal lo llamó la estrella de rock de la traducción.
- Gregory Rabassa (1922-2016)
Las traducciones de Rabassa de los libros de Gabriel García Márquez son elogiadas por su fidelidad y talento artístico. De hecho, Márquez esperó tres años para que Rabassa tradujera «Cien años de soledad».
Como escribió una vez la traductora literaria Anthea Bell: «[los/as traductores/as] se dedican a crear una ilusión: la ilusión de que lo que el/la lector/a está leyendo no es una traducción, sino la realidad». [translators]
De esta forma rendimos homenaje a estos/as magos/as de los idiomas que unen culturas y enriquecen vidas con sus palabras.