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TRADUCCIÓN INTRALINGÜÍSTICA EN EL SECTOR BIOSANITARIO

En las facultades de estudios lingüísticos y traducción es habitual que se generen incesantes debates en torno a una cuestión difícil de elucidar: ¿Qué es la traducción? Por supuesto, no existe una única respuesta que pueda emplearse categóricamente y todos los enfoques que se adoptasen estarían condicionados por el contexto de su desarrollo. Sin embargo, parece que, tanto en el ámbito especializado como en el propio registro coloquial, las personas parecen coincidir a la hora de identificar el ejercicio de la traducción con el de la equivalencia interlingüística, es decir, reproducir en un idioma lo que se ha expresado originalmente en otro. Si bien es innegable que esta es una definición lícita y, de hecho, la más frecuente en términos generales para el ámbito de la prestación de servicios lingüísticos, conviene saber que, según varios autores, la traducción también puede tener lugar dentro de un mismo idioma, lo que se conoce como traducción intralingüística.

 

Esta modalidad, que recibe asimismo el nombre de reformulación (in. rewording), consiste en interpretar unos signos verbales e interpretarlos mediante otros signos verbales en la misma lengua. Dicho de otra forma, reformular es expresar un enunciado con otras palabras para un fin específico; por ejemplo, algunos casos de reformulación se dan cuando se adapta un texto escrito en castellano antiguo al español actual, cuando intentamos explicar el significado de una palabra perteneciente a un dialecto con una más general (p. ej., «Guagua significa «autobús»».), o, mismamente, cada entrada de un diccionario de definiciones (p. ej., Guagua: Vehículo automotor que presta servicio urbano o interurbano en un itinerario fijo.). Aunque pueda parecer baladí, esta clase de traducción forma una parte fundamental en todas las lenguas y es la que nos permite fluctuar entre diversos registros y conocer con precisión los distintos signos verbales. En muchas ocasiones, se ha afirmado que se trata de una traducción «inferior» porque no se precisan conocimientos tan específicos, pero la realidad es muy distinta. En algunos sectores, poder reformular un texto y adaptarlo a otro registro requiere un gran dominio del campo de especialidad y una capacidad adecuada de comunicación. Entre otros, este es el caso de los prospectos.

 

Este documento a modo de folleto acompaña siempre a los productos farmacéuticos y sirve para describir su composición y explicar su modo de empleo. No hace mucho tiempo, este tipo de texto era conocido entre los consumidores legos por su incomprensibilidad o, al menos, por lo artificioso de su lenguaje. Esto se debe a que en un mismo papel se resumía la composición farmacológica que necesitan conocer los profesionales, los posibles efectos adversos, las contraindicaciones y el modo de empleo, entre otros. Es decir que era un texto dirigido a dos públicos completamente diferentes (el especializado y el general) en el que se empleaba una terminología técnica y que, como consecuencia, desalentaba a los consumidores a leer los apartados destinados a ellos. Por ello, de un tiempo a esta parte, se observa un proceso de traducción intralingüística por el que ahora se difunden dos tipos de prospectos a fin de satisfacer las necesidades específicas de cada grupo: la información sobre el producto y el prospecto para el paciente.

 

Los productos sanitarios deben presentar lo que en Europa se conoce como Summary of Product Characteristics (es. información sobre el producto) y Patient Information Leaflet (es. prospecto para el paciente). El primero se redacta para que puedan consultarlo los profesionales sanitarios o para que pueda publicarse en bases de datos especializadas. Contiene la información farmacológica de un producto y describe cómo debe utilizarse para tratamientos concretos. El segundo, también de carácter obligatorio de cara a la comercialización de un producto, sirve como hoja informativa para consumidores sin conocimientos específicos. Este se redacta a partir de la mencionada información sobre el producto y describe de forma más divulgativa el modo de empleo y las precauciones que deben tenerse en cuenta. Además, como curiosidad, es obligatorio proporcionar estos documentos adaptados para los invidentes y las personas con visión reducida (Directiva 2001/83/CE, artículo 56a), así como en todos los idiomas de la unión europea para que pueda comercializarse dentro de la misma.

 

A continuación, os mostramos un ejemplo en inglés y en español en relación con el Paracetamol.

 

Paracetamol (en inglés): Summary of Product Characteristics

 

Pharmacodynamics/Mechanism of action: Paracetamol is a p-aminophenol derivative that exhibits analgesic and antipyretic activity. It does not possess anti-inflammatory activity. Paracetamol is thought to produce analgesia through a central inhibition of prostaglandin synthesis.

 

Paracetamol (en inglés): Patient Information Leaflet

 

WHAT PARACETAMOL IS AND WHAT IT IS USED FOR

The name of your medicine is Paracetamol 500mg Tablets (called paracetamol throughout this leaflet). This medicine contains paracetamol. It belongs to a group of medicines called analgesics (painkillers) and is used to treat pain (including headache, toothache, back and period pain) and cold or flu symptoms.

 

Paracetamol (en español): Información sobre el producto

 

Contraindicaciones: Hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes del medicamento. Pacientes con enfermedades hepáticas (con insuficiencia hepática o sin ella) o hepatitis viral (aumenta el riesgo de hepatotoxicidad).

 

Paracetamol (en español): Prospecto para el paciente

 

No tome Paracetamol: Si usted/su niño es alérgico (hipersensible) al paracetamol o a cualquiera de los demás componentes de Paracetamol. Si usted/su niño padece alguna enfermedad del hígado. Si usted/su niño sufre anemia hemolítica grave.

 

Como se puede apreciar, son dos pares de textos en los que se hace referencia a la misma realidad, pero en los que esta se divulga de manera completamente distinta, según las necesidades informativas del público de destino. Desde el punto de vista de la traducción, es preciso que el profesional de servicios lingüísticos reproduzca esta función en la versión traducida y no intente hacer cambios de registro o sobreexplicar conceptos, un «error» muy frecuente en el sector. De esta forma, las traducciones se ajustarán con mayor precisión a las necesidades de los clientes y respetaremos el lenguaje propio de cada grupo receptor.

 

Ref. de la imagen: https://www.wallpapertip.com/wpic/wbibRx_drugs-2-pharmacist-day-images-hd/

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