En nuestro último post hablamos de la importancia que tiene contar con una página web cuyos contenidos estén perfectamente traducidos y adaptados a la cultura de los países en los que se desee desarrollar el negocio de cualquier empresa.
Hoy queremos ocuparnos de una práctica que ha revolucionado gran parte de las relaciones que establecemos con medios y empresas, además del plano personal. Nos referimos a los vídeos y al amplio abanico de posibilidades que nos ofrecen como elemento publicitario y promocional. Plataformas como YouTube, las redes sociales y aplicaciones como WhatsApp nos han dado la posibilidad de crear y compartir nuestros propios vídeos.
Se trata de un método comunicativo que destaca por su inmediatez y simplicidad ya que es capaz de llegar de forma casi instantánea a cualquier rincón del mundo gracias a los canales ya citados. Pero, ¿cómo es posible traducir los contenidos de los vídeos? Seguramente, la respuesta más lógica sea “a través de los subtítulos”. La ya veterana (a pesar de contar con apenas 12 años desde su creación) plataforma de vídeos YouTube nos permite insertar subtítulos directamente sobre los propios vídeos, sin necesidad de ningún programa de edición profesional. Pero es aquí donde aparecen los problemas ya que un subtítulo impreciso, creado por nosotros mismos o por un traductor automático, no permitirá a la plataforma etiquetar los contenidos de forma adecuada, lo que hará que nuestros vídeos no tengan el alcance e impacto que podría esperarse atendiendo al contenido original del formato.
Otra posibilidad para conseguir que los vídeos tengan un gran potencial de expansión internacional es utilizar la técnica del Voice Over o Voz Superpuesta en la que, a diferencia del subtitulado o del doblaje donde el tiempo debe ajustarse a la voz, no hace falta traducir palabra por palabra lo que dice el interlocutor (por lo que nos brinda la posibilidad de realizar una traducción más libre). Otra ventaja es que tampoco resulta fundamental ajustar la voz de la persona que realiza el doblaje al movimiento de la boca del interlocutor original.
En todos los casos, desde Montero Traducciones recomendamos siempre emplear traductores profesionales que puedan ofrecer no solo un servicio de traducción preciso, sino también un asesoramiento personalizado basado en los deseos y necesidades de los clientes.
Imagen: GoodVidio