En muchas ocasiones es complicado lograr un pleno entendimiento entre el paciente y el personal sanitario a la hora de establecer una comunicación por un problema médico, especialmente si ni siquiera hablan la misma lengua.
A pesar de contar con herramientas de calidad como la conversación a tiempo real vía telefónica para traducir e interpretar las demandas del afectado, no es suficiente. También existe la opción del empleo de sistemas informáticos que se encargan de traducir de forma simultánea las necesidades del paciente. Sin embargo, tampoco podríamos hablar de un sistema óptimo y completo, al no tener en cuenta una interpretación cultural de la conversación entre el médico y el paciente.
Parece necesaria la figura de una persona encargada de no sólo traducir las demandas del paciente, sino también, de superar las barreras culturales entre éstos y el personal sanitario para que puedan llevar a cabo una conversación exitosa y que el tratamiento o diagnóstico sea totalmente entendido para el afectado.
Estos mediadores interculturales no son meros intérpretes, puesto que no solo realizan la transferencia interlingüística, sino que también coordinan, median y negocian el significado social y cultural. Las modalidades interpretativas utilizadas por los propios mediadores pueden ser presenciales, de forma remota o a través de dispositivos multimedia, facilitando así un amplio abanico de posibilidades para la traducción e interpretación de los pacientes y el personal sanitario.
En conclusión, existen procesos complicados como los embarazos, situaciones de urgencia o diversas enfermedades que requieren un lenguaje muy técnico y a veces dificultoso con distintos niveles de especialización, especialmente si existen diferencias de idioma y cultura entre médico y paciente. Por ello, se cree necesaria la figura de un mediador sociocultural con cercanía comunicativa y altas dotes de especialización para poder emplear y comprender un lenguaje altamente técnico.
Fuente: TREMEDICA
Imagen: Cursos Gratuitos
